Después de doce horas de viaje, un bus, una mototaxi y una combi, por fin arribé a Marca, un pequeño poblado perteneciente a la provincia de Recuay, ubicado a  unos  2644 msnm los cuales no alcanzan para contemplar los nevados cordillera arriba, sin embargo, el acogedor clima y el ambiente festivo me dieron una cordial bienvenida.

El pueblo entero celebra la fiesta en honor a su patrón San Lorenzo de Marca y a diferencia de otros pueblos de similar población en la sierra norteña, los marquinos tienen sus raíces profundamente arraigadas a su tierra, resultándome increíble y conmovedor como niños, jóvenes, adultos y ancianos participan activamente de sus celebraciones, vistiendo sus trajes típicos y bailando sus danzas tradicionales.

Lo que hace especial la fiesta de San Lorenzo de Marca, es que es la viva representación de la conquista española y el mestizaje posterior a la misma. Uno de los personajes principales de la fiesta es el Inca y sus Pallas, su danza y sus trajes típicos combinan la cultura Inca con simbolos religiosos propios de la conquista.  El séptimo día de la fiesta y al culminar la corrida de toros patrocinada por la Capitana de la tarde, el Inca, después de una feroz persecución y entre los alaridos de los asistentes, es capturado por el Capitán y sus vasallos, que representan a Francisco Pizarro, Almagro y Luque respectivamente.

También participan de la fiesta los Mayordomos y junto con la capitana de la tarde, el Inca y el Capitán, se encargan de alimentar y dar de beber durante la fiesta a todos los asistentes, sean pobladores o visitantes. Tengan por seguro que la comida, la cerveza y los huaynos no van a faltar.